Demagogia

Con todo esto de las elecciones presidenciales 2018 en México me tienen pensando, de verdad que no es presunción. Mucho hablan los candidatos, mucho se tiran mierda los unos a otros y se sacan a lavar toda la ropa sucia que acarrean desde tiempos inmemorables pero a mi lo que me atormenta en realidad son otros puntos que a continuación trataré de exponer.

¿Por quién hay que votar para que los mexicanos se vuelvan puntuales, para que dejen de tirar basura, para que se vuelvan consientes del daño que causamos al medio ambiente, para que dejen de robar, para que se respeten las filas, los ordenes y las reglas de convivencia básica establecidas, para que las mujeres dejen de ser blancos de agresiones, para que se erradique la discriminación y violencia hacia personas homosexuales, para que el huevón se ponga a trabajar y se exterminen los imbéciles al volante? En fin para que se comience a respetar al prójimo.

¿Quién que se siente en esa silla tiene el poder de cambiar todo sólo por elevarse al puesto más alto del mandato de este país?

Creo que todos conocemos la respuesta: NADIE.

Todo es egocentrismo, este país no cambiará con su gobernante porque bueno la historia lo ha demostrado, sólo ha empeorado. Han pasado por ahí 64 presidentes, 63 legislaturas se han instalado desde 1857 y NO HA CAMBIADO PARA BIEN.

El afortunado o desgraciado que llegue a ocupar este puesto tan disputado, lamento decirles, no tendrá el poder de cambiar lo que nosotros como sociedad no logremos mejorar, su tarea es representarnos e intentar facilitar un ambiente en el que nosotros como pueblo logremos desarrollarnos y satisfacer nuestras necesidades a través del trabajo, lograr nuestra realización depende más, lamentable o afortunadamente, de nosotros mismos.

Más de 100 millones de mexicanos no se van a transformar como por arte de magia en mejores personas por sentar a tal o cual en tan mentada silla, EMPIEZA POR TI.

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